El 21 de diciembre es el día del Espíritu de la Navidad. Se dice que en esta fecha el Espíritu de la Navidad baja a la Tierra y visita a todas las personas de buena voluntad por la noche, específicamente entre las 9:00 de la noche y las 12:00 de la medianoche. Por eso, algunos aprovechan para agradecer y pedir.
En este día, las personas celebran con tradiciones y rituales, que van desde escribir cartas con sus deseos para el próximo año hasta prender velas y limpiar la casa con sal marina y esencia de limón o mandarina.
Esta celebración tiene sus orígenes en una antigua tradición celta que celebraba la llegada del invierno, a lo que actualmente se le conoce como Solsticio de Invierno, que tiene lugar cada 21 de diciembre en el Hemisferio Norte.
La tradición celta que celebraba del solsticio de invierno, al igual que muchas otras incluyendo la Navidad, se ha transformado con el paso del tiempo hasta derivar en el Espíritu de la Navidad.
Se dice que el Espíritu de la Navidad baja a la Tierra y visita a las personas de buena voluntad la noche del 21 de diciembre, entre las 9:00 pm y las 12:00 am. Ese es el momento propicio para hacer peticiones.
Otra teoría dice que hace cientos de años un ser de gran belleza y bondad llegó a la Tierra proveniente de un mundo alejado y se instaló en tierras nórdicas y, al ser más evolucionado, lograba hacer realidad los deseos de las personas a las que visitaba cada año (coincidiendo con el invierno) para regalarles luz y energía.
Parece algo esotérico, pero no lo es. Aunque hay varios rituales para poner en práctica este día, para atraer la prosperidad y la abundancia, cada persona lo celebra a su manera.
Hay quienes hacen una gran celebración e invitan personas a sus casas. Pero también hay quienes prefieren celebrarlo en silencio, en solitario o en la intimidad de la familia. Todo es válido para recibir al Espíritu de la Navidad.