Ya no solo es el aumento en los productos alimenticios lo que afecta al bolsillo del venezolano, sino el aumento del pasaje, que se está experimentando, sin ser anunciado.
Tanto en rutas urbanas, cortas, como en rutas largas de Maturín, desde la semana pasada y producto del alza progresivo y agresivo del dólar, algunos conductores comenzaron a cobrar el aumento del pasaje. Otros, han esperado en silencio la decisión que pudiera darse, ante la situación que se vive.
Los ciudadanos de a pie, usuarios al fin, se encuentran a las expectativas sobre el presunto monto que podría tener el precio del pasaje urbano. De hecho, autobuses y carritos “desde hace rato” se encuentran cobrando un incremento aún no establecido legalmente.
Dasleny Carrillo, usuaria y habitante del sector La Cruz, indicó que hasta el pasado viernes pagaba 3 bolívares. “Pero, se escucha el rumor de que son 5 bolívares para La Cruz y la Zona Industrial”. Mientras tanto, Carlos García, de Los Guaritos, indicó “yo he estado pagando en bus, 2 bolívares en la semana, algunas veces. Ellos dijeron que era 3 bolívares el lunes. No sé si es verdad. Y en los carritos, ahora acabo de pagar 2,50. Ellos dicen que los repuestos les vinieron muy aumentados”.
Presumiblemente, y dada la situación, se incremente el precio del pasaje, mientras que el bolsillo del ciudadano se vuelve cada día más vacío; donde, prácticamente, salarios, pensiones, bonos y hasta aportes de familiares extranjeros se convierten en “sal y agua”.